Hoy os traigo una receta de las de toda la vida, que hacía mucho tiempo que quería enseñaros: pudin de pan.
Me encanta la repostería tradicional, sigo siendo del que se pide un flan o un pudin casero como postre en un bar jajaja. Creo que tenemos una amplia variedad de postres tradicionales que no debemos perder Además, estos suelen ser bastante sencillos así que no hay excusas para no prepararlos.
Este pudin de pan es una muestra perfecta de receta tradicional de aprovechamiento. En vez de tirar las sobras de pan que se empiezan a poner duras, hacemos un postre con ellas Podéis utilizar cualquier tipo de pan que tengáis por la cocina. Por ejemplo, para las fotos yo utilicé un poco de barra de pan del súper y un poco de pan de molde casero que me sobró.
Ingredientes:
- 150 g de pan del día anterior (o incluso pan duro)
- ½ l de leche entera
- La ralladura de una naranja
- 1 rama de canela
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 4 huevos L
- 100 g de azúcar
- Un puñado de pasas
- ½ vaso de agua con 3 cucharadas de brandy (para hidratar las pasas)
- Caramelo
Preparación:
Empezaremos por las pasas, para que se hidraten bien mientras preparamos el resto de la receta. Calentamos medio vaso de agua junto con 3 cucharadas de brandy (podéis usar vino dulce, cualquier otra bebida parecida o sin nada si queréis quitar el toque de alcohol) y vertemos las pasas dentro. Reservamos hasta el final.
Vertemos la leche en un cazo y lo ponemos a fuego alto hasta que rompa a hervir. En ese momento, retiramos el cazo y bajamos el fuego casi al mínimo. Agregamos a la leche la ralladura de una naranja, una rama de canela y la vainilla. Volvemos a poner en el fuego durante unos 5 minutos para infusionar la leche y que coja el sabor de los ingredientes. Pasado ese tiempo, apagamos el fuego, retiramos del mismo y dejamos enfriar durante otros 5 minutos.
En un bol amplio, ponemos el pan troceado y, una vez hayamos enfriado la leche, la vertemos (quitando la rama de canela y, si queréis, colándola para quitar la ralladura de naranja). Removemos para que todos los trozos de pan se empapen bien de la mezcla y se ablanden.
Por otro lado, batimos los huevos junto con el azúcar y lo vertemos en el bol donde tenemos el pan en remojo. Trituramos con la batidora hasta obtener una masa sin apenas grumos.
Cogemos el molde que vayamos a usar para nuestro pudin de pan y cubrimos tanto el fondo como las paredes de caramelo. Podéis animaros en hacer vosotros mismos el caramelo, pero yo he de admitir que he utilizado caramelo de bote por comodidad (¡mil perdones!). Vertemos la masa del pudin de pan y echamos también las pasas que teníamos hidratándose.
En este momento, deberemos tener el horno precalentado a 180ºC con una fuente llena de agua dentro (el agua ya deberá está hirviendo o a punto de hacerlo). Ponemos el molde con el pudin de pan en la bandeja con agua y horneamos al baño maría durante unos 45-50 minutos, hasta que el pudin esté cuajado (podéis comprobar pinchándolo al igual que con los bizcochos). Al final, si veis que la capa de arriba empieza a dorarse mucho, podéis cubrirlo con papel de aluminio.
Sacamos del horno y dejamos enfriar completamente. Ahora bien, podemos desmoldar el pudin de pan sobre una fuente alargada o meterlo tal cual está en el molde en el frigorífico para que se enfríe aún más y repose, que está más rico si cabe de un día para otro
Y listo, cuando lo vayáis a servir, simplemente cortadlo en rebanadas y acompañadlo de lo que más os guste: nata, más caramelo, mermelada….
¡Que lo disfrutéis!
Si os animáis a probar la receta de este pudin de pan, no dudéis en compartir vuestra versión etiquetándome en las redes sociales (Facebook | Instagram | Twitter).
Ese pudin tiene muy buena pinta y tiene qué está muy rico yo cuándo lo hacía nunca le puse ralladuras de naranjas enhorabuena qué lo disfrutes