¿Preparáis las zanahorias de igual manera para acompañar vuestros platos? Hoy os voy a enseñar a prepararlas de una manera deliciosa: zanahorias glaseadas con tahini.
Estamos acostumbrados a preparar las zanahorias al vapor, cocinadas, salteadas o en preparaciones parecidas de manera que nos quedan un poco como comida de hospital jajaja Os aseguro que estas zanahorias glaseadas van a ser vuestra perdición.
Suelo prepararlas con una mezcla de soja y miel, pero esta vez me he animado a usar un Pedro Ximénez viejo que me he traído de El Puerto y que es una maravilla. Entre el PX y la miel, le dan un toque dulce buenísimo.
Además, como era un buen manojo de zanahorias, con las hojas de las mismas he preparado un pesto para intentar aprovechar al máximo todo y desperdiciar la menos cantidad posible de comida.
¿Os animáis a prepararlas?
Ingredientes:
- 6 zanahorias hermosas (1 kg aprox)
- 50 ml de Pedro Ximénez
- 50 ml de miel pura
Salsa de tahini
- Tahini
- Un chorrito de zumo de limón
- Sal y pimienta
Preparación:
Pelamos las zanahorias y las cortamos por la mitad a lo largo. Si queréis, en vez de asarlas en mitades, podéis cortarlas en bastones igualmente.
En un pequeño bol o vaso mezclamos el vino y la miel hasta que se integren ambos ingredientes.
Disponemos la mitad de las zanahorias en una fuente apta para horno y las pincelamos con la mezcla de Pedro Ximénez y miel. Colocamos el resto de las zanahorias y volvemos a pincelar. No gastéis toda la mezcla, reservad para luego
Metemos al horno precalentado a 200ºC y horneamos las zanahorias hasta que esté blandas. Dependiendo del tamaño de las mismas, nos tomará más o menos tiempo. En mi caso estuvieron unos 40 minutos aproximadamente.
Mientras estén en el horno, cada 10 o 15 minutos volvemos a pincelar las zanahorias con la mezcla de vino y miel, con esto conseguiremos que se vayan glaseando.
Para preparar la salsa de tahini simplemente mezclamos todos los ingredientes en un pequeño bol. Os advierto que, dependiendo del tahini que utilicéis, puede ser que cuando añadáis el limón parezca que se “corta” y se hace más espeso en vez de rebajar la textura. A mi me ha pasado con algunas marcas, por eso os lo advierto. En esos casos, sirve perfectamente para mojar las zanahorias pero no podréis verterla por encima.
Cuando las zanahorias estén en su punto, las servimos en un plato con un poco de salsa de tahini por encima. También podéis añadir unas semillas o unos frutos secos triturados por encima para darle un toque crujiente.
¡Que las disfrutéis!
Si os animáis a probar la receta de estas zanahorias glaseadas con tahini, no dudéis en compartir vuestra versión etiquetándome en las redes sociales (Facebook | Instagram | Twitter).